Cada 30 años Saturno vuelve al mismo punto en el que estaba cuando tú naciste y lo pone todo patas arriba. Hace que te plantees y te replantees las cosas, que conectes con eso que quieres ser y te pongas en el centro de tu galaxia. Un momento de inflexión emocional que sucede a tus 30, tus 60 y tus 90, y que marca un antes y un después.
Nosotras, 30 años después de nuestro nacimiento, estamos aquí para acompañarte en ese momento vital. Como lo hemos hecho en los últimos 30 años y nos gustaría hacerlo en los próximos 30. Una campaña pensada para todas las mujeres, porque todas en algún momento estaremos bajo los efectos de Saturno.